No descuides tu aspecto físico si trabajás desde casa – Noeh Liñeiro.
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No descuides tu aspecto físico si trabajás desde casa

No descuides tu aspecto físico si trabajás desde casa

Tal vez te levantás a la mañana pensando inocentemente que vas a estar en casa disfrutando de la comodidad de tu pijama y sin preocuparte por peinarte bien… pero recibís un mensaje en donde te avisan que tenés que entrar en reunión en media hora. Y ahí vienen las corridas ¿qué me pongo? ¿Dónde ubico la compu o el celu? ¿Dónde están los auriculares?  ¡Justo hoy el perro no deja de ladrar y los vecinos de discutir!

¡Cuánto estrés! ¿Dónde quedó la previsibilidad de la rutina laboral?

El primer elemento que tendrás que descartar de tu rutina si querés organizarte mejor claramente es ¡el pijama!

Estar en pijama en algún momento no está mal, más si sabés que es fin de semana o feriado, donde tu agenda no te limita o te sorprende. Pero durante la semana tomar esa decisión podría traerte varios sobresaltos.

Mi intención no es demonizar tú tan adorada prenda de dormir, pero justamente se creó para el descanso y es ahí en donde debe usarse.

Entiendo que trabajar desde casa implica para algunas personas no saber qué usar, y en pos de buscar sentirse cómodos caen en el recurso más simple y al alcance de la mano.

Hay quienes cambian el pijama por las prendas de deporte, ya sean sueltas o un poco más al cuerpo, y otros se inclinan por el estilo “me voy a esforzar en ponerme lo peor que tenga” y es así que surge de algún cajón ese buzo manchado con lavandina y ese pantalón con tantos agujeros que hasta deprime a las polillas.

Sin dudas estar en casa hace que el vestuario se relaje, pero no es motivo de caer en los extremos del “no me arreglo en lo más mínimo” porque no le hará muy bien a tu imagen y a tu salud.

Cuando te vestís a diario como si fueras a salir a la calle para cumplir con tus obligaciones, estás poniendo activo a tu cerebro, y lo programás para ser más dinámico y actuar en “modo trabajar”. Mientras que al quedarte en pijama, le estás dando el mensaje de que estás en “modo reposo”, y por tanto no vas a lograr enfocarte en tus tareas de manera tan productiva como quisieras.

Cuando nos arreglamos la devolución del espejo también es más positiva, y nos ahorramos perder tiempo en pensamientos negativos como “parece que me pasó un tren por arriba” “¿engordé?”

Vestirte con ropa más arreglada no implica que te vistas de manera incómoda, hay muchos looks que podés armar sumamente cancheros y confortables. Solo vas a necesitar chequear en tu armario si contás con prendas que funcionen de esa manera, sino ya sabés que tendrás que invertir en ello.

Beneficios de vestirte bien a diario

– Te vestís de manera completa y coordinada, no solo vestís la parte superior que se ve frente a cámara. (Se me vienen a la cabeza todos los videos y memes sobre personas que se levantaron a buscar algo en plena video llamada, y mostraron que debajo no llevaban nada o algún pijama muy gracioso, ¡no hay vuelta atrás de eso!)

– Si tenés una reunión, al finalizarla continúas tu día normalmente, y no te tenés que volver a cambiar.

– Fomentás el hábito diario y cada vez te cuesta menos pensar en qué ponerte.

– Controlás el peso, ya que si usás pijamas y pantalones deportivos o sueltos a diario, perdés la noción sobre tus proporciones reales.

– No te agarran en harapos las visitas repentinas que puedas llegar a tener, y no perdés tiempo en cambiarte si tenés que salir a comprar o realizar algún pendiente.

– Vas a estar cuidando tu imagen

– Reforzás tu autoestima, verte bien aunque sea de manera sencilla hace que te percibas desde un lugar más positivo.

La higiene y cuidado personal

El uso del desodorante y el peine claramente son costumbres que nunca debés perder de vista, pero con higiene personal no me estoy refiriendo solo a eso, también a que no dejes de utilizar algún perfume, colonia o body splash que te gusten, ya que los aromas nos ayudan a sentirnos bien con nosotros mismos y eso se refleja hacia fuera.

Dientes blancos detrás de una gran sonrisa ayudan a generar empatía, y en cámara cuando tenés que dar una presentación o hacer una video llamada laboral te destaca.

En los hombres, lucir una barba bien recortada hace que el rostro se acentúe mejor y se vea más prolijo.

Mantener la piel de tu rostro limpia e hidratada es importante para que te sientas y te veas saludable, pero también influye en tu buen aspecto físico.

A la hora de tener que exponerte frente a un dispositivo de video es importante que puedas mostrar una piel saludable, ya que la cámara dimensiona determinadas particularidades que pueden no beneficiarte como los problemas de oleosidad, acné, manchas, líneas de expresión, o poros dilatados por ejemplo.

Un cuidado diario hará que no tengas que preocuparte por el aspecto de tu rostro en video. Claro que el refuerzo de un maquillaje sutil también ayuda…pero si la piel no está sana el make up no disimula tanto y dañará más tu piel.

Maquillaje

El make up no es solo cuestión de mujeres, ya hay muchos hombres que se preocupan más por su apariencia que antes y entienden que, por ejemplo, corregir las ojeras ayuda a tener una mirada más descansada.

Otros lo utilizan para mitigar manchas o granitos, hay quienes dan un siguiente paso y usan delineador para destacar la forma de sus ojos. Esto ya es cuestión de gustos y estilos.

En el caso de las mujeres, el maquillaje sutil ayuda a mantener un rostro prolijo, pero hay una realidad frente a cámara, y es que a veces parece que estamos a cara lavada aunque estemos maquilladas. Si realmente querés que se note tu maquillaje optá por usar aquellos colores con los que tal vez nunca saldrías a la calle como rojos, borgoñas, y violetas en los labios. ¡Respetando claro tu colorimetría personal!

No tenés que maquillarte a diario, pero sí asegurarte de tener esta herramienta cerca a la hora de exponerte.

 

Todo lo que te acabo de comentar sé muy bien que no se trata de un gran descubrimiento, pero quiero hacerte notar que cuando realizamos hábitos diarios para cuidarnos y no caemos en dejarnos estar no solo se simplifican las cosas, también nos sentimos mejor con nosotros mismos, somos más productivos y podemos brindar una imagen mucho más profesional.

Acordate que profesional no solo hay que serlo, sino también ¡parecerlo!